viernes, 27 de enero de 2017

I miss u

Esta noche apareciste, algún archivo en mi memoria te hizo presente.

Y entonces, vuelve a mi mente el recuerdo de nuestro primer encuentro. Esos minutos que me hicieron saber mucho de ti, y de darme cuenta que eras una alma hermana en este lugar que, a ti al igual que a mi a veces te resultaba algo incipiente, yo aún logro compararlo con un platillo que por olvido se ha servido sin sal, ni pimienta.
Fue bastante grato ese momento, poder ayudarte en algo tan simple como escribir un cartel y poder compartir un poco de nuestras vidas. Recuerdo que al momento de despedirnos se respiró en el ambiente esa sensación de no querer terminar la charla, pero ¿a dónde ir por un café? ... al oxxo? no, en realidad no era una idea aceptable para ninguno de los dos y lo expresamos.

Después los tiempos y espacios llevaron a encontrarnos, compartimos momentos muy llenos de calma y paz espiritual, aprendí mucho de ti y ahora quisiera tener un poco más presentes tus palabras.

Así como se dió el encuentro, fui desistiendo a ese espacio hasta que me desaparecí, algunos mensajes intecambiados, que se que fueron nada.
Y si apareciste esta noche fue con el propósito de pedirte perdón, y aunque no habría impedido jamás tu decisión, me he quedado con el deseo de volver a verte, pues di prioridad a otros aspectos en mi vida, postergue esa visita, se que no hay manera de devolver el tiempo y ya ha pasado más de un año desde que tu ya no estás, ahora es demasiado tarde.

Desde aquí te envio una oración, un pensamiento elevado al universo, deseando que estes en un lugar mejor.

Un abrazo